Cuesta arriba para comerciantes mantener a flote sus negocios
Recientemente, estudios han revelado que el costo de vida se ha convertido en la principal preocupación en Puerto Rico, junto a la seguridad y la salud.
Este aumento ha afectado tanto a comerciantes como a familias.
Los comerciantes enfrentan desafíos como la alta inflación, el aumento en costos de electricidad y la falta de personal, lo que ha llevado a un incremento en los precios de venta. Los últimos datos indican aumentos en alimentos, alojamiento, salud, entre otros.
Esta situación exige una reforma contributiva que respalde a las familias y a los pequeños negocios, ya que los consumidores no tienen ventajas fiscales comparables a grandes empresas que solo pagan el 4% en impuestos, mientras que los ciudadanos comunes siguen cargando con tasas más altas.
Es vital que la Asamblea Legislativa actúe para aligerar la carga financiera de los puertorriqueños.